El Poder de la Mente

¿Cómo controla la mente al cuerpo?

Por ejemplo, utilizando una antigua técnica de yoga y meditación conocida como Tum-mo, los monjes tibetanos han demostrado a los científicos su capacidad de aumentar su propia temperatura corporal y mantenerla lo suficientemente alta como para que sean capaces de secar sábanas húmedas y frías envueltas alrededor de su cuerpo, incluso en una habitación fría. En un punto en que mayoría de la gente comenzaría a sentir escalofríos, estos monjes realmente comenzaron a emitir vapor cuando con sus cuerpos secaban una tras otra las sábanas mojadas y frías. Otros monjes han demostrado la habilidad de cambiar las temperaturas de diferentes zonas de la piel.

Existen también otros ejemplos algo más siniestros del control de la mente sobre el cuerpo. Por ejemplo, en la cultura aborigen australiana tradicional y en las culturas que creen en el vudú, la "maldición" causa a menudo que la salud de una persona se deteriore hasta el punto de morir. Parece que es su creencia en el poder de la maldición la que hace que esto ocurra.

La mayoría de las personas no se dan cuenta de hasta qué punto su mente tiene control sobre su propio cuerpo. Realmente no debería sorprendernos ya que la distinción que hacemos entre el cerebro y el cuerpo es algo artificial: ambos están íntimamente conectados. El cerebro es parte del sistema nervioso, que llega a todo el cuerpo, y el cerebro controla la producción de hormonas y libera productos químicos asociados con diferentes estados emocionales.

Todos nosotros hemos experimentado - al menos hasta cierto punto - el ser capaces de controlar nuestros cuerpos con nuestras mentes. Por ejemplo, si imaginas que cortas un limón por la mitad, que lo pones en tu boca y lo muerdes, no te sorprenderás al empezar a sentir que tu boca produce más saliva. También tenemos todos la experiencia de que podemos disminuir o aumentar nuestro ritmo cardíaco respirando más lenta o rápidamente.

Estos son todos los ejemplos básicos de cómo nuestro pensamiento puede afectar nuestro cuerpo. ¿Pero cómo de lejos puede llegar? ¿Qué nivel de control somos capaces de lograr sobre nuestra propia biología? Aún no sabemos, pero los resultados de experimentos científicos en esta área parecen indicar que podemos tener mucho más control del que pensábamos que fuera posible.

¿Cómo controlala mente al cuerpo? Placebo

Por ejemplo, el Dr. Fabrizio Benedetti de la Universidad de Turín llevó a cabo algunos experimentos fascinantes en lo que se llama el efecto Placebo. Generalmente, en ciencia, un placebo se refiere a un terrón de azúcar o una inyección de agua salada que se utiliza como "base" para probar la medicina "real". La mitad de las personas de esta prueba médica reciben la medicina real y la otra mitad reciben pastillas placebo.

Pero lo extraño es que normalmente aún las personas que reciben la píldora placebo tienden a mejorar más de lo que cabría esperar sólo por azar. En otras palabras, simplemente creyendo que estás recibiendo ayuda médica puedes mejorar tu salud.

Pero lo que encontró el Dr. Benedetti fue aún más interesante: el efecto placebo puede crear el mismo efecto químico en el cuerpo que una droga. En otras palabras no crea sólo un efecto subjetivo donde la pastilla placebo nos hace pensar que nos sentimos mejor, realmente crea un cambio bioquímico en nuestro cuerpo. El efecto placebo demuestra que lo que crees que es verdadero puede influir profundamente tu propio cuerpo.

También plantea algunas preguntas interesantes: ¿en qué medida funciona la medicina moderna simplemente porque esperamos que funciona? ¿Y hasta qué punto la salud de las personas mayores se deteriora porque creen que será irremediable?



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