Aumentar tu inteligencia emocional con 10 trucos
1 / Enriquecer tu conciencia
En un mundo que está en constante evolución, es esencial el adaptarse y enriquecer tu vida de forma diaria. Todos los días tienes que aumentar tu inteligencia emocional. Lo que importa no es sólo el estado de tu conciencia, sino cómo seguir hacia adelante.
Ejercicio: durante 5 minutos en el día, tómate un tiempo para mirar a las personas de tu alrededor tratando de no emitir un juicio sobre ellos, sino para verlos como realmente son. Al hacer este experimento te darás cuenta hasta que punto pones etiquetas a la gente.
2 / Aumenta tu autoestima
Hay que distinguir la confianza en uno mismo, que es respetar lo que hace, de la autoestima, que está más relacionado con lo que eres. Detrás de esto, la pregunta es ¿qué valor te das a ti mismo?, ¿estás cuidándote a ti mismo todos los días y estás saliendo con personas que cuidan de ti? Porque eso es lo que alimenta la autoestima.
Ejercicio: apunta algo que de lo que hayas disfrutado a lo largo del día.
3 / Refuerza tu asertividad
La asertividad implica comunicar tu experiencia interior con tu entorno. Consiste en afirmarse con alguien especial nos pide más presencia al igual que con alguien que ignoramos.
Ejercicio: Di algo que parezca importante para ti y que tienes problemas para expresar con una persona de su entorno. Esto no debe ser ni demasiado difícil ni demasiado fácil.
4 / Aumenta tu autorrealización
Realizarse, etimológicamente, es hacer que se haga realidad: un deseo, un sueño, un proyecto, una aspiración. Es el paso de concepto a la manifestación concreta. Se trata de no pensar más y escuchar directamente tus motivaciones, tu corazón. Ejercer la profesión que siempre quisiste hacer, escribir un libro, atreverte a decir "te quiero" a la persona que amas... crear la versión de ti mismo que siempre soñaste.
Ejercicio: Comienza con algo que valoras, pero que aún no te has atrevido a hacer. Es necesario que esto sea viable dentro de las próximas24 horas. Luego observa cómo te sientes.
5/ Escucha
Enriquecer tu escucha es escuchar las palabras y las emociones tanto propias como de tu interlocutor. Se trata de sentir las emociones con tu cuerpo y no sólo con la cabeza cuando estás con alguien. Para aumentar tu inteligencia emocional no debes elegir entre las palabras y las emociones.
Ejercicio: en la siguiente conversación que tengas, usa 5 minutos para observar las emociones que se reflejan en la otra persona.
6 / Aumenta tus capacidades sociales
Después de escuchar como un primer paso, ve más allá mediante el diálogo. Deja hablar a tus emociones. Habla con tus propias emociones y las de tu interlocutor. La relación emocional es todo. Es profunda, vibrante y rica.
Ejercicio: Atrévete a hablar con una persona con la que te cruzas todos los días, la conozcas o no. Empieza un diálogo teniendo en cuenta sus emociones, es decir, escuchándole, e intercambio emociones. Si todo el mundo tiene en cuenta lo que uno siente y lo que el otro siente, se enriquece el diálogo.
7 / Acepta y desarrolla la responsabilidad
A menudo existe la confusión entre la responsabilidad y la culpa. No tienen nada que ver. No te puedes sentir culpable cuando uno es responsable. No hay buena conciencia. Si es buena no puede ser consciente, porque la conciencia no es ni buena ni mala. Simplemente, es.
Ejercicio: asume la responsabilidad de participar plenamente en una acción profesional hasta que lo consigas. Esto debería ser una pequeña acción diaria y habitual. A continuación, expresa lo que sientes después de completar esta acción.
8 / Mantente optimista
El optimismo no es ver el lado positivo. Es optimizar una situación o una experiencia. Así te aseguras de que tu vida avanza y evoluciona día a día. Estamos en el lado de la acción, no en el de la percepción. No permanezcas en una situación complaciente, sé un actor de cada momento de tu vida.
Ejercicio: ve a un jardín o un bosque y disfruta de la belleza de los árboles, del agua, de la luz. Disfruta de cada momento. Simplemente no vas a estar presente, vas a disfrutar de este momento. La calidad de tu vida es una elección personal.
9 / Aumenta tu resiliencia
La resiliencia es una continuación del optimismo. Se trata de desarrollar la capacidad de utilizar los acontecimientos más o menos dolorosos para crecer, convirtiéndose en uno mismo.
Ejercicio: cuéntale a un amigo algo sobre una experiencia que fue dolorosa, expresando tus emociones mientras que eres empático contigo mismo, con esa parte de ti que ha sufrido. La benevolencia no es complaciente. Cuando activas la capacidad de recuperación, liberas una situación traumática para ti que ya no te afectará en todos tus actos.
10 / Profundiza con tu entorno
Ve más allá, escucha y apoya tus emociones y las de tu interlocutor, también para compartir tus propios sentimientos en una relación de paridad. No es necesario ser un gurú, es una filosofía de la vida que te llevará a crecer.
Ejercicio: aparta un tiempo en el día para estar con tu cónyuge, hijo, amigo y dedica toda tu atención a demostrarles que les entiendes y sientes lo que percibes sobre ellos.
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